Porque me cuesta imaginar un entorno más positivo. Disfruto del ambiente que se genera el día de vuestro enlace. Todas las personas invitadas van con ganas de pasarlo bien, de comer, beber, bailar, de salir perfectos en las fotografías e, incluso, aprovechar la ocasión para ligar… Ya se sabe, de una boda sale otra boda.
Y… por qué no decirlo, yo también me emociono habitualmente junto a vosotros, aunque siempre intento disimularlo, ¡guardarme el secreto!
¡Una boda es la positividad hecha evento!